jueves, 2 de abril de 2009

SORPRESA DE CUMPLEAÑOS

Es la madrugada de mi cumpleaños y luego de beber unas cervezas con Y. en su casa, decidimos enrumbarnos en busca de otro lugar que nos cobije. Llevo conmigo el libro que me acaba de regalar, le digo que si me aburre su charla me pondré a leer. Llegamos a un bar barranquino que nos convence por su media luz y su música apenas perceptible. Nos parapetamos en la mesa mas escondida y pedimos unos mojitos. La hierbabuena y el alcohol nos animan a una charla llena de risas y disparates.

Cuando los mojitos nos van gustando más y planeamos dónde seguir la noche de pronto se nos acerca una chica guapa y nos pregunta si puede sentarse con nosotros. Hacemos un gesto de resignación que ella interpreta como un si. Se sienta y con un gesto apenas perceptible en esa media oscuridad envenenada por los cigarros llama al mesero y le pide tres mojitos. Los bebemos mientras nos interroga acerca de qué hacemos ahí y si somos enamorados. Con un gesto cómplice decidimos seguirle el juego, le decimos que estamos festejando un año de enamorados. Se alisa el cabello con los dedos, saca un cigarro, le da una profunda chupada y sonríe con un gesto de satisfacción.

Así pasa un buen rato, ente tragos, cigarros, sonrisas, preguntas y mentiras como respuestas. Cuando estamos lo suficientemente borrachos nos dice que quiere proponernos algo, Y. le dice que no se va volver burrier y yo le digo que el servicio completo cuesta cien soles, ella festeja nuestras bromas y nos dispara a quemarropa: "tengo mi novio que está sentado en esa mesa (nos señala una mesa al otro extremo y recién distinguimos a un chico guapo que bebe solo y nos manda una sonrisa trabajadamente seductora) y queremos hacer un intercambio sexual y los escogimos a ustedes". No lo termina de decir y explotamos en risas, el trago se nos sale hasta por la nariz. Ella no se inmuta y espera a que nos calmemos, cosa que tarda buen tiempo en suceder. Cuando lo hacemos nos reitera su propuesta mientras toca el cabello de Y., por un momento la escena me gusta pero no me dejo llevar. Le decimos que necesitamos pensarlo, le pedimos su número y ella lo escribe en una servilleta, la besa y la pone en el bolsillo de mi camisa. Se para y se va moviendo el culo como una yegua.

Terminamos los mojitos y vemos que nos siguen observando desde su mesa, decidimos ir al baño, ella memoriza el número y me dice algo al oído. Cuando entro al baño saco un lapicero y copio su número en todos los lugares posibles junto al siguiente texto: "pareja moderna busca incautos para intercambio, la casa paga los tragos". Salgo y veo a Y., le pregunto qué ha escrito, me lo dice matándose de la risa: "soy Nicole, me tiro lo que sea con tal que respire". Nos sentimos dos criaturas traviesas. Me abraza y besa en la mejilla y me dice que ése es mi otro regalo, salimos amparados en la confusión del alcohol. En el taxi de regreso nos damos cuenta que olvidamos el libro. Me dice que soy un tonto y yo le digo que seguro van hacer un trío con el libro y nos volvemos a cagar de la risa. No hay dudas que es un buen cumpleaños.

3 comentarios:

Rogger dijo...

primero en comentarrr

hola, qué tal:)

siempre un trago y los libros hacen buena compañia. De hecho, cuando suelo ir de viaje, nunca me falta un lbro querido , con respeectivo trago para alimentar la garganta.

saludoss:)

santiagoMdc dijo...

todo hubiese quedado bien si no olvidabas el libro, porque!!!!!

¿De que estas Hecho? dijo...

... jajaja...

:D ...

pobre librO!!!

que haran con el!!

T_T

jajaja...
Buen pOst!


nOs leemos!
Cdt