jueves, 26 de marzo de 2009

Asalto de Navidad

Vamos a comprar con un amigo un regalo para su sobrino, decidimos ir al congestionado (y una vez chamuscado) "Mesa Redonda". Encontramos todo tipo de juguetes pero el que nos termina convenciendo es un carro enorme a batería donde cabe un niño grande, el vendedor se ha disfrazado estratégicamente de Papá Noel y con un tono de voz al ritmo de villancicos nos endulza acerca de todas las bondades de ese pequeño bólido, yo miro a mi amigo y le digo que es una buena oferta y a su sobrino le va encantar. En su afán por convencernos, nuestro improvisado viejito pascuero arrancha a un niño de los brazos de su madre y lo monta en el carro, faltaba más, nos convence. Le damos el dinero, nos envuelve el juguete en papel regalo y sentimos que hemos hecho un buen trato. Esquivando todo tipo de personaje que nos rodea llegamos a un taxi y me pide acompañarlo a su casa para entregarle el regalo a su sobrino "me llega esperar al 24, se lo doy hoy mismo", emocionado por participar en tamaña postal navideño-familiar no lo pienso mucho y me subo al taxi, en el camino hacemos todo tipo de bromas sobre cómo lo tomará su sobrino.

Cuando llegamos a casa del niño le entrega el regalo sin mayor trámite y él sin mayor trámite (ni siquiera le agradece) destroza la envoltura y destroza, de paso, su ilusión: lo que va emergiendo debajo de esos jirones de papel regalo nos deja patitiesos, de aquel bólido pistero que vimos hace un rato no hay nada, solo asoma un montón de pedazos de plástico y tecnopor, sintiéndonos ultrajados en nuestra inteligencia, tomamos todos los restos de basura y en otro taxi nos vamos de vuelta en búsqueda de ese Papá Noel estafador. Cuando llegamos encontramos una muralla de policías delante del puesto, a nuestro estafador navideño enmarrocado y sometido y al lado un montón de cojudos haciendo fila con su respectivo paquete de basura en brazos listos para reclamar. Humillados y avergonzados dejamos discretamente a un lado nuestro paquete y nos marchamos cada uno por su lado sin despedirnos.

2 comentarios:

santiagoMdc dijo...

jaja yo habia escuchado de una estafa parecida pero en las malvinas, felismente no me a tocado pasar por eso xD

¿De que estas Hecho? dijo...

T_T

ya me habia emocionado con el
carrito yo también :(